martes, 31 de marzo de 2015

Crítica: "Alma Teatral" (para espectaculosdeaca.com.ar)

Lía espera tranquila que los espectadores se acomoden en sus asientos observando paciente en el living de su casa. Un sillón, un mueble, una mesita, una silla y una alfombra -su living es cálido y simple y ella está cómoda esperando sin apuro que el público se sitúe. No es casual. La base de “Alma Teatral” es la intimidad, como si el espectador y Lía – interpretada por la actriz, directora y dramaturga Gabriela Izcovich- fueran dos viejos amigos que se reencuentran para compartir una cena agradable una noche fría de invierno.
Ella recuerda en voz alta su encuentro con el Dr. Oscar Alma. “¿Con ese apellido cómo no llamar la atención?” Mira al público, dulce, locuaz, su pelo negro brillante y un vestido color bordó como vino tinto acompañan el relato del recuerdo nostálgico.
El salón iluminado tenuemente se prende y apaga acompañando la intensidad del relato, viajando del pasado al futuro, de la alegría a la nostalgia y la duda.
Ella conversa con los espectadores atrapándolos en los personajes que giraron en torno a su relación con el Dr. Alma. Sin duda estamos frente a una historia de amor. Él puede representar tranquilamente el alma de Lía. Su Animus. Su Ser materializado en el cuerpo e identidad de la pareja complementaria.
El pelo negro de Lía está atado con un rodete sobre la nuca y sobre la frente caen unos rulos negros que embellecen sus ojos oscuros llenos de alegría y fuerza como un sensual animal salvaje. Cocina, toma un poco de vino blanco, sumerge al espectador en el relato empujándolo a un subibaja de emociones vertiginosas, con una calma y experiencia elegante.
La trama desnuda la experiencia de Lía que ha batallado por su vida – una ex actriz de luto, que aún no tiene la fuerza para seguir adelante y formar una vida nueva-. “Sea por una cosa o la otra, finalmente una relación cae en dolor” afirma. Ella se sienta junto a los espectadores, les habla cara a cara logrando un estado de trance. ¿Esto está ocurriendo? ¿Ella está contando su vida real? ¿Esto es una obra de teatro o una catarsis realista? Los límites se confunden, el arte empieza a hacer su magia sumergiéndolo todo en una dulce duda atemporal. Hay gran placer en dejarse perder en la niebla que Izcovich genera en el ambiente. Ella ha preparado un sin fin de trucos finos y admirables para romper todas las barreras y límites de la conciencia. La música suena, la poesía es susurrada con el gusto amargo del vino que se seca en las comisuras. El climax llega y se prolonga. Es una experiencia tan real y auténtica cómo la de escribir una buena crítica de teatro. El trance es sublime, Izcovich usa cientos de recursos para prolongarlo en el tiempo. El trabajo de su Alma es sin duda formidable. ¿Esto es realidad o ficción? ¿Es su vida o pura ilusión? No importa: Dentro y fuera de la sala quizás lo único real siempre sea la magia.

By Fede Frisach
Marzo 2015
Publicado en http://www.espectaculosdeaca.com.ar/alma-teatral-2/

Crítica: "Demasiada Corta las Piernas" (para espectaculosdeaca.com.ar)

Un drama psicológico sobre el caso Edipo femenino, donde una niña deslumbrada por la necesidad de afecto y el amor idealizado hacia la figura paterna, es engañada por la enfermedad de un padre que la abusa sexualmente manteniendo a la vez un estrecho vínculo psicópata con su pareja: una pobre mujer cómplice y desvalorada que carece de todos los atributos maternales y femeninos.
La obra es narrada por cinco personajes temperamentales que discuten entre sí para dar la mejor versión -o las más fríamente acertada- acerca de la vida de esta niña Suiza que es presa de la ilusión de una familia enferma. Ella y su madre aparecen y desaparecen entre los silencios que estos personajes se permiten.
La utilería es ingeniosa y se apoya en proyecciones visuales, audios, música, logrando trasladarse de un hospital al living de la casa, del living a la habitación de la niña -y sin detenerse los recursos surgen como conejos del sombrero.
La sala se llena, el publico parece haber visto la obra varias veces. Están emocionados. En el aire se respira un aire de éxito. La trama tensa insiste con mantener la expectativa. Los actores hablan y se mueven a un ritmo frenético quizás para que el espectador se mantenga atrapado.
Con el morbo sobre el filo de un cuchillo perfecto -al estilo de la cultura Suiza-, la obra adaptada por Diego Faturos pretende escarbar en lo profundo del barro social. Hay que contemplar que Suiza es uno de los países más devastados por décadas de guerras donde las familias han quedado completamente trastornadas entre los hermosos alpes y el aire frío y puro. Detrás de la ajustada burocracia y estable economía, Suiza y Austria son uno de los países con más abusos infantiles del mundo. Y la historia no es para nada universal, aunque clínicamente es un caso lógico. Diego Faturos decide ir hacia el límite una y otra vez disfrazando la perversión en ingenuidad infantil -tal como lo puede sentir y vivir una niña de cuatro años que es abusada sexualmente. La obra busca la repulsión, el shock, excenta de armonía -como en una familia enferma. Aquí la búsqueda no es de arte bello, sino que sin duda estamos frente a una catarsis de una dramaturga europea que ha sufrido y herida emocionalmente ha comprendido bien las bases de la obra de Sigmud Freud.
El cuchillo escarba más y más y abre con profundidad la herida. El olor hediondo de la carne cruda invade la sala. Es repulsivo. A falta de conclusión la búsqueda es sensacionalista. Y lo logra. Con éxito. Los aplausos se prolongan durante varios minutos. El cuchillo no cesa de escarbar. Ni las manos de aplaudir. El publico obtiene lo que desea.

By Fede Frisach
Marzo 2015
Publicado en http://www.espectaculosdeaca.com.ar/demasiado-cortas-las-piernas-2/

Critica: "Miranda" (para espectaculosdeaca.com.ar)

Dejando entrar la luz.
Una sala de velorios a oscuras con el aire denso y pesado que siempre suelen tener esos sitios, allí está Carmina de luto, viendo la telenovela sentada frente a la televisión. Entra una mujer con lentes negros y un ostentoso abrigo de piel. Es la famosa y reconocida actriz Miranda. Carmina atónita la nota quien es , -¡si hasta estaba viéndola por televisión en ese mismo momento!.
Pero Miranda no está con aires de choluleo, más bien está completamente de luto: ha venido a ver al difunto que espera en la habitación detrás recibiendo los últimos adioses…
Mientras Miranda se toma su tiempo en la otra habitación, el esposo de Carmina llega. Además de ser el hijo del difunto es también un vago inútil y violento que al parecer todavía no es consciente de que en pocos meses será padre junto a Carmina, y también llega su madre; una fría, distante e inteligente mujer que llora con dignidad su luto. Todos ellos exponen a su tiempo sus propias miserias, sus faltas graves entre sí y para con el resto de la sociedad. Nadie allí es un modelo ideal. Frente a esta situación se encuentran con Miranda que los reconoce perfectamente a todos. ¿Pero… quién es ella? ¿Qué hace allí? Parecen conocerla de algún lado, aunque no precisamente de la televisión…
“Miranda” es una obra que, a modo de telenovela, expone los conflictos de una familia frente a los valores sociales enfermos y estancados que sin duda asfixian la libertad y la expresión de los individuos. Aquí no se trata de ser imparcial, y la teoría no es en absoluto relativa; se trata del derecho a ser, vivir y amar. Y aún a pesar del nudo angustioso del luto, una familia se reencuentra con su pasado para dejar relucir a toda luz el dolor y la miseria que la humanidad ha escondido -por lo menos visiblemente- en las últimas décadas, para intentar de alguna forma reconciliar la angustia y generar un presente lleno de aceptación y armonía. A fin de cuentas se trata de dejar vivir, de aceptar y aceptarse a uno mismo. De darle la oportunidad al otro a que se desarrolle y crezca.
“Miranda” es una obra de Ulises Puiggrós quien también actúa interpretando quizás el rol más duro. Sin embargo la obra entera logra su catarsis bajo las luces del escenario.

By Fede Frisach
Marzo 2015
Publicado en http://www.espectaculosdeaca.com.ar/miranda-2/

Nota: Regresa A.N.I.M.A.L. (Magazine Delicacy, España)

A.N.I.M.A.L. es la banda Argentina de metal con mas proyección al exterior que se mantuvo en pie casi toda la década del 90. De ensayar a una salita casera en el hogar de la familia de Gimenez en el conurbano de Buenos Aires a compartir camarines junto a NOFX y Green Day y grabaciones en Indigo Ranch Studios en pleno Malibú…
Luego de sacar el reconocido “Fin de un Mundo Enfermo“, fue por el 1996 cuando la banda liderada por Andrés Gimenez llega a su pico de popularidad en argentina con el disco “El Nuevo Camino del Hombre” que abrió las puertas para que Max Cavalera de Sepultura produzca “Poder Latino” en el 1998 en la ciudad de Los Angeles, cuando aún tener contacto con una banda internacional parecía una hazaña imposible de realizar para cualquier banda Latina o inclusive Europea…
Lo cierto es que en 2004, luego de casi diez formaciones distintas, Andrés Gimenez hizo un parate con A.N.I.M.A.L. tras la confusa salida del baterista y productor Martín Carrizo.
Andres Gimenez formó luego D-Mente, donde su propuesta iba -según sus propias palabras- desde HIM a Queens Of The Stone Age. Lo cierto es que D-mente logró sacar 4 placas con grandes invitados de la escena local Latina como León Gieco, Juanse, Gustavo Cerati, Luis Alberto Spinetta y Abel Pintos y además haber producido una gran cantidad de cortes difusión e innumerables shows por todo el país y aperturas de grandes eventos internacionales… Pero luego de sufrir bajas de la formación original, Gimenez decidió ponerle un punto final a D-mente quizás sin haber logrado el reconocimiento merecido por la calidad de sus discos y shows.
Mientras tanto Gimenez ponía a punto a De La Tierra, banda que comparte junto a Andreas Kisser de Sepultura, Alex de Maná y Flavio de Los Fabulosos Callidacs. Aún así, ninguno de sus proyectos logró superar lo producido en la época dorada de A.N.I.M.A.L. Y es que, quizás por esa nostálgica sensación de que el metal argentino se merecía una revancha, en marzo de este año la web de A.N.I.M.A.L. fue actualizada bajo el lema “El Poder Latino está de regreso” y anunciando así una presentación en el teatro Vorterix de Capital Federal, Buenos Aires.
Castro (por el baterista Marcelo Castro, ex integrante en la época del año 2000) me llamó mientras yo estaba con De La Tierra en New York, y me propuso juntarnos a hablar. Yo no me esperaba el llamado, ni el regreso, es más: primero pensé que Titi, nuestro bajista, no estaría disponible. Pero pudimos coordinar, y decidimos volver” explicó Gimenez en la radio donde realizarán su show luego de diez años de ausencia.
Por otro lado, ex integrantes de la banda, como Marcelo Corvalán, líder y voz de la banda Carajo (banda que mantiene hace más tiempo que su exitosa trayectoria con A.N.I.M.A.L.) fue interrogado acerca de la reunión de Gimenez junto a Marcelo Castro y Titi Lapolla. Su respuesta no fue del todo clara“Obviamente esto lo veo de cerca, porque fui parte. Y pienso algo (…) Pero no tengo nada para decir (…) si, y claro que lo veo porque A.N.I.M.A.L. fue una parte de mi vida (…) quizás solamente pienso que no es la formación de la que más me gusta…”.
Por otro lado Gimenez también respondió a alguna pregunta parecida pero desde la vereda de en frente: “Sería ridículo que yo le pida permiso a otros ex integrantes de A.N.I.M.A.L. para volver a tocar… La banda salió de una salita de ensayo en Ituzaingó y el que le puso de nombre Acosados Nuestros Indios Murieron Al Luchar fue Andrés Gimenez, y Andrés Gimenez fue el único integrante que estuvo en el proyecto de comienzo a fin”, y de todas formas agregó “Leon Gieco siempre me reconoce que no soy celoso. A mi me encanta que le vaya bien a las otras bandas del metal argentino. Me encanta Deny, me encanta Rata Blanca, me encanta Carajo…”.
Lo cierto es que A.N.I.M.A.L. vendió todos los tickets para el teatro Vorterix en 5 días, viendose obligados a agregar otra función el 31 de mayo. Junto a Marcelo Castro -que pasó por Buffalo, Jesus Martyr, Rata Blanca- y Titi Lapolla -202, Saibo, Power of Soul. Formación que lanzó el disco “A.N.I.M.A.L. 6″ en el 2001 (producido por Martin Carrizo), con cortes como “Vamos de Pie“, “Gritemos Para No Olvidar” y “Buscando Llegar Hasta el Sol“.
“A.N.I.M.A.L. no volvió así nomás. No volvió a hacer dos shows y listo… volvimos en serio. Acá hay sentimientos involucrados. Venimos a tocar y girar, a grabar un disco nuevo… A.N.I.M.A.L. ya es un nombre, una identidad… y los tres ya estamos grandes y aprendimos de los errores para que no vuelvan a pasar” señaló Gimenez.
La única realidad aquí es que A.N.I.M.A.L. es una de las bandas emblema del metal argentino y que ha logrado objetivos de un nivel altísimo. Por otro lado, nunca se podrá escapar del todo a la controversia, al dicho de pasillo, a la especulación. Muchos nombres han pasado por A.N.I.M.A.L. expuestos a un cierto nivel popular. Por otro lado, ¿quien no extraña ver al power trío en vivo, cantando los himnos del metal del los 90’s? Gimenez ya dió unas pistas: “Vamos a tocar temas como Revolución, Guerreros Urbanos, Más Cabezas para Tu Pared, Combativo“. En fin. La lista es larga. Y los dotes de los músicos son de un alto nivel técnico. Sin dudas es un buen regreso. Al menos esperado…
Podes entrar a la web oficial de A.N.I.M.A.L. haciendo click aquí.

By Fede Frisach
Publicado en Marzo del 2015
Link en http://magazinedelicacy.com/music/regresa-a-n-i-m-a-l/